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Mes: septiembre 2022

NARCISISMO

El narcisismo es un trastorno de personalidad caracterizado por una búsqueda constante y desesperada de amor hacia unx mismx. Buscan este amor y atención excesivos en otras personas, pretendiendo ser el centro de la vida de lxs demás.

El amor propio es sano, pero la necesidad de sentirse siempre el/la mejor, por encima de lxs demás y queriendo siempre tener razón, acaba siendo un problema para el/la narcisista y su entorno.

Las personas con este trastorno llevan muy mal la crítica. Tienden a ser personas egoístas y egocéntricas que no dudan en mentir y manipular para conseguir lo que quieren. Para estas personas el fin justifica los medios.

Suelen ser personas con una gran falta de empatía, no consiguen ponerse en el lugar de la otra persona y sentir lo que el/la otrx siente. En ocasiones pueden mostrar empatía cognitiva, que son una serie de actos o frases aprendidas, es decir que son capaces de decir y hacer cosas que se supone que se han de hacer en determinadas situaciones, pero no lo hacen porque de verdad lo sienten si no porque saben (han aprendido) que es lo políticamente correcto. Es decir que lo hacen para mantener intacta la imagen que se han creado.

Aunque parezca lo contrario son personas con baja autoestima y con sus actos y palabras pretenden bajar tu autoestima, someterte, para sentirse mejor ellxs, sentirse superiores a ti.

Existen diferentes tipos de narcisistas:

El/la queda bien: es una persona que suele quedar muy bien con lxs demás, es una persona encantadora que se ofrece con facilidad. Sin embargo, con su círculo más íntimo no es así, suele ser una persona crítica, exigente, manipuladora, culpabilizadora, humilladora e incluso maltratadora con su pareja e hijxs. El problema de la familia, en este caso, es que nadie les cree ya que hacia el exterior esta persona da una imagen impecable de sí misma, mientras a ellxs les maltrata física o/y psicológicamente.

El/la victimista: Su identidad se ha construido en torno a ser una víctima. Utilizan su victimización para manipular a través de la pena y la culpabilización de los demás. No se responsabiliza de su vida si no que hace responsables a lxs demás. Puede presentar conductas pasivo-agresivas en las que “pincha” repetidamente a la otra persona hasta conseguir que ésta acabe explotando y entonces ya puede ser nuevamente la víctima. Algunas veces se sacrifican y hacen cosas por los demás para poder después victimizarse y quejarse de su situación o de lo que han tenido que hacer, llegando a hacer sentir culpable a la persona que ha recibido la ayuda. Suele ser una persona que se queja de sus circunstancias, pero hace poco o nada para cambiarse a sí misma o para cambiar la situación, espera que sean los demás quienes cambien para sentirse ellxs mejor.

Es una persona que tiende a exagerar su dolor y sus circunstancias. Aquí tenemos que distinguir entre este tipo de narcisismo y una víctima real de algún acontecimiento traumático. No es lo mismo ser una víctima que un/a victimista.

El/la poderos/a: es una persona enamorada del poder. Solemos encontrarlos en altos cargos o en política. Es una persona arrogante, humilladora, explotadora. Suele ser el/la típicx trepa. Trata mal a sus subordinadxs, sólo le importa los resultados. Busca parejas florero a quienes exhibir como trofeos.

El/la estafador/a: es una persona “encantadora” sabe conquistar a lxs demás para utilizarles y explotarles a través de su encanto personal. Toda su zalamería se sustenta en unos motivos totalmente egoístas. Sabe decirte lo que necesitas en cada momento con tal de conquistarte y poder conseguir de ti lo que quiere. Conseguirá que le invites a cenar, que le dejes dinero que no te devolverá o tardará en devolverte, que le compres regalos, ropa, e incluso que le mantengas económicamente. En esta categoría encontramos por ejemplo a los líderes de las sectas entre otrxs.

El/la infiel: es una persona que no tiene problema en ser infiel, de hecho disfruta engañando a la pareja confiada, manipulando al/la amante para que se quede eternamente esperándole, y cuando lo consigue su autoconfianza aumenta, con lo que se autorefuerza más para continuar engañando. Es una persona que no se aplica a sí misma las normas morales si no que considera que éstas sólo las han de respetar los demás, él/ella está por encima de estas normas. Sin embargo, no aceptará que tú le seas infiel.

El/la furioso/a: es una persona con mucha ira. Presenta estallidos repentinos ante cualquier crítica aun cuando ésta pueda ser constructiva. Es una persona muy sensible a cualquier ofensa, ya sea real o imaginaria, lo que le hace explotar de manera desproporcionada, pudiendo llegar a ser una persona violenta. Suele tener un punto importante de desconfianza y un elevado sentimiento de injusticia y traición, lo que le hace percibir mala intención en las conductas de los demás. Detrás de esta ira excesiva suelen tapar una gran tristeza e incluso desesperación.

El cuerpo: es un tipo de narcisismo muy habitual en la actualidad. Su autoestima se sustenta sobre su imagen física a la que da gran importancia. Es una persona que necesita gustar a todo el mundo, ser admirada, lleva mal el no gustarle a alguien, el rechazo. Es a través de su imagen y la valoración que los demás hacen de su imagen que se siente una persona valiosa. Es una persona que hace mucho deporte, retoques estéticos, todo cuánto haga falta para tener un físico 10. Mientras se centra en su físico, en lograr ese cuerpo perfecto, ese aspecto deslumbrante, se olvida de sus problemas, de sus carencias, es una forma de tapar sus heridas.

El Dios/La Diosa: es una persona con aires de grandeza. Se cree muy especial, con dones o cualidades personales, e incluso sobrenaturales, por encima de la media que no son reales. Es una persona con una gran soberbia, una gran falta de humildad. Son esas personas que lo saben todo sobre cualquier tema, pudiendo llegar a cuestionar los conocimientos profesionales de otra persona aunque ellxs no tengan formación académica ni experiencia al respecto.  Presenta una “paranoia” de endiosamiento de sí misma que hace que se crea por encima de los demás. En ocasiones puede llegar a ser condescendiente con otras personas.

El/la psicópata integradx: No todos lxs narcisistas son psicópatas pero sí todxs lxs psicópatas son narcisistas. La diferencia está en que el/la narcisista no disfruta haciendo daño aunque si tiene que hacerlo para conseguir lo que quiere no lo dudará, hará lo que tenga que hacer. Sin embargo el/la psicópata sí disfruta haciendo daño.

Es importante tener presente que no hay una personalidad narcisista pura, es decir que la persona tiene un conjunto de características que le hacen encajar en una de estas categorías, sin embargo, puede mostrar también alguna característica del resto de las categorías.

También nosotrxs podemos identificarnos con alguna de estas categorías y entonces deberíamos poner remedio y pedir ayuda. Es posible que te identifiques con muchas de estas características o sólo con alguna/s, por eso hay que diferenciar entre el trastorno de personalidad narcisista y los rasgos narcisistas (defensa narcisista). Todxs nosotrxs tenemos algún rasgo narcisista o alguna conducta en algún momento, y también es conveniente hacernos conscientes para cambiarlas, pero eso no implica que tengamos un trastorno de personalidad narcisista.

Es importante también poder detectar si tienes a alguna persona con esta personalidad o rasgos de personalidad en tu entorno. El poder ser consciente de ello te ayudará a comprender por qué actúa como actúa, y a poder ponerle límites. Esta toma de conciencia te ayudará también a no creer absolutamente todo lo que te dice y a no sentirte culpable cuando te intente manipular.

Si no te ves capaz de ponerle límites por ti mismx o no puedes dejar de sentirte culpable pide ayuda a un psicólogx para que te enseñe a gestionar a esa persona difícil.

madrastra Fuente de la imagen: Google

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